Soledad Carnebale, fundadora de la Asociación de Mujeres e Hijxs de Personas Privadas de su Libertad, cuestionó las condiciones en las que se encuentra el sistema penitenciario, el hacinamiento en algunas dependencias, las deficiencias en la alimentación y en la garantía de los derechos básicos de las personas detenidas. En declaraciones al programa “el delivery”, que se emite por FM Centro, invitó al vicejefe de gabinete Jorge Canals “a que recorra las unidades de detención, tanto la alcaidía de Ushuaia y la unidad de detención de Río Grande, en la que no hay una sobrepoblación, pero hay otros tipos de problemáticas que también son importantes mencionarlas”.
La fundadora de la asociación manifestó que la situación va más allá de la cantidad de personas compartiendo lugar, y que implican severas violaciones de los derechos humanos. Afirmó que la sobrepoblación en la alcaidía de Ushuaia ya está en una situación de desborde y cuestionó las afirmaciones de Canals, quien había negado violaciones a los derechos humanos en una entrevista hace algunos días en el mismo programa. Carnebale le recordó al funcionario que la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos establece parámetros de dignidad. “Hablamos de garantizar el trato dignamente de las personas detenidas, como también el acceso a la salud, hablamos de los traslados que se tienen que realizar de los detenidos a lo que son los centros educativos, los centros de salud, hospitales, turnos médicos y demás, hablamos de un derecho a un lugar habitable”.
La referente de la asociación de familiares informó que “al no desinfectar y tener 36 personas dentro de un pabellón, que quizás es para 30, o en lo que es la alcaldía en un solo espacio, tener alrededor de 40 detenidos y no desinfectar correctamente, eso produce un contagio de enfermedades graves y el ingreso de las visitas para el mismo servicio penitenciario”.
La falta de acceso a la salud, la vivienda digna y la alimentación adecuada son solo algunas de las preocupaciones planteadas por Carnebale durante la entrevista. En este sentido, expresó que el hecho de que “no se encuentren con los especialistas, en este caso psicólogos o el gabinete interdisciplinario en funcionamiento, también implica que esa persona no pueda nunca concretar ese tratamiento que se aplica para reinsertarse en la sociedad”.
"Nosotros propusimos de nuestra parte poder subsanar, como quien dice, algunas cuestiones como el acceso a la alimentación, poder aportar desde nuestro lugar con otros alimentos quizás más nutritivos o que puedan ser más económicos también para nuestro bolsillo", contó.
Además de señalar los problemas sistémicos, Carnebale hizo un llamado apremiante a la acción, instando a un diálogo abierto y constructivo entre todas las partes involucradas en el sistema penitenciario. En este sentido, expresó que “se tiene que habilitar el vínculo y el diálogo con la familia, porque somos los que transitamos este contexto constantemente, somos los que vemos las problemáticas y que también hacemos desde el lugar de no tener tampoco recursos, tratamos de asistir a gente que está detenida y que no tiene ningún tipo de familiar, ningún tipo de asistencia”.