El ex Convencional Constituyente Provincial, Jorge Rabassa, cuestionó duramente la reforma constitucional que propicia el gobernador Gustavo Melella por considerar que la verdadera intención detrás de esa iniciativa es perpetuarse al frente del Poder Ejecutivo de Tierra del Fuego. Además, confirmó que el artículo 196 impide al gobernador, vice e intendentes postularse en una posible elección constituyente.
En diálogo con “el delivery”, el dirigente radical recordó que “el espíritu que primaba en la Convención Constituyente” era que los titulares de los poderes ejecutivos (gobernador, vicegobernador e intendentes) no pudieran presentarse en una elección como convencionales. En este sentido, alertó que “modificar por una vía impropia un artículo de la Constitución, que luego es distribuido como un documento público por parte de las autoridades, tanto provinciales como municipal, se constituiría un delito”.
"A mí lo que me parece que aquí hay una gran capa de hojarasca que nos está impidiendo ver cuál es la motivación real para la modificación de la Constitución, que es nada más el artículo que dice que el gobernador y el vicegobernador solo pueden aspirar a una reelección", dijo Rabassa en alusión al intento del gobernador Gustavo Melella de aspirar a un tercer mandato.
"Hay artículos de la Constitución que nunca fueron puestos en funcionamiento, hay muchos puntos y artículos que nunca fueron reglamentados", afirmó y subrayó la importancia de primero implementar plenamente la actual carta magna antes de buscar modificaciones.
A modo de ejemplo, el ex convencional mencionó la falta de aplicación del Consejo Económico y Social, una institución que no fue puesta en funcionamiento desde que se instituyó la Carta Magna fueguina. Al respecto, resaltó la paradoja de que "aquellos que no pusieron nada de sí para poner en marcha esas instituciones hoy parecen considerarse habilitados en pontificar sobre cosas que probablemente ni siquiera entendieron bien de qué se trataba".
En sus declaraciones, Rabassa alertó sobre los peligros de permitir que los detentores del poder alteren la letra de la Constitución a su conveniencia, argumentando que esto puede llevar a un desquicio institucional y político en la provincia. "Si se llega a concretar, se va a estar violando la letra y el espíritu de la Constitución provincial, nada más que para satisfacer los intereses personales de algunas personas que están haciendo abuso de poder", advirtió.
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